Día 1º
Viernes.
Hoy será
de las pocas veces que no madrugamos para ir de vacaciones. El Alsa sale a las
dos del mediodía y nos lleva directamente hacia la terminal 4 del aeropuerto de
Barajas donde ya nos esperan Maxi, Pedro y Alejandro.
Los
aviones están llenos a rebosar. Primero a Dubai, después a Shanghai.
¿Quien
dijo que no se puede viajar en el tiempo? De repente cuatro horas más tarde.
Luego otras cinco. Viajar a un país lejano es como viajar en el tiempo además
de en el espacio. Gentes diferentes, culturas diferentes, todos juntos en una
máquina volante de aluminio que por muchas veces que suba a ella siempre me
parece increíble que se mantenga en el aire.
El airbus boeing
777-300 es una moderna maquina que, por muy moderna que sea, siempre, como en
todos los aviones , te da la impresión de que vas montado en una lata de
sardinas volante. Grande, sí, pero lata, al fin y al cabo. Te puede tocar un
asiento
empotrado
en medio de dos roncadores o de un niño chillón; sin contar que para ir al
lavabo tienes que pedir permiso al vecino de al lado que, a lo mejor se ha
quedado dormido y no te atreves a molestarle.
La comida
no es de lo mejor y la tienes que comer con un cuidado exquisito para que no se
te caiga al suelo o al pantalón originando una pequeña catástrofe.
En fin,
que pasar 8 o más horas en esa obra de ingeniería voladora puede no ser un
plato de gusto, pero forma parte del viaje y hay que tratar de disfrutarlo todo
lo que se pueda.
Día 2º
Hotel Yun´
s Paradise
Sábado.
Llegada
El Boeing
777-300 comienza a descender ya que solo nos queda media hora escasa para
aterrizar en Shanghai.
Con una
hora de retraso aterrizamos en el aeropuerto de esta ciudad de 26 millones de
habitantes. Un calor húmedo nos asalta al salir del aeropuerto donde ya nos
esperaba Jimmy el guía de la agencia.
Jimmy Wang
no es gran hablador pero algo nos cuenta en el trayecto de 40 kilómetros que
separan el aeropuerto del hotel. Nos dice que quizás sería interesante coger un
autobús turístico que recorre la ciudad ya que nos permitiría hacernos una idea
de ella rápidamente dado que solo vamos a estar un día en Shanghai.
(Pronúnciese Sanjai ) Nos aconseja beber agua embotellada y dos cosillas más
como que se puede subir a la torre de la televisión y visitar unos jardines
cercanos al hotel.
Desde nuestro
trasporte vemos la vía del primer tren maglev de alta velocidad comercial de
Shanghai capaz de viajar a una velocidad máxima de 430 km. /hora. Para el que
le interese un tren maglev es un tren que utiliza el magnetismo para levitar
sobre las vías evitando así el rozamiento. Yo pensé que solo lo tenía china
pero gracias al libro que leía Pedro me entere que también lo tiene Japón
(Yamanashi), (como no) y el Reino Unido (Birminghan).
Solo hay
una joven en recepción, quizás porque ya son las 12 y media, que se afana en
atendernos para asignarnos las habitaciones 601, 602 y 620.
Nos cobran
300 yuan por adelantado en concepto de los productos que hay en la habitación y
que podríamos consumir asegurándonos que nos lo devolverán al marchar si no lo
hacemos.
Jimmy me
da su número de movil y nos despedimos hasta el lunes a las seis
media.
El hotel
yun´s Paradise Shanghai me da una impresión rara. Es grande y de estilo
clásico, casi barroco con un espacioso hall bastante despejado y sin adornos
que me llamen la atención. La habitación 602 está bien. Aunque no es muy grande
el baño si lo es; está separado del dormitorio por una mampara de cristal con
una cortina descendente; tiene una bañera separada de la pared que nos llama la
atención por su forma y tamaño.
Unos
bocadillos y a dormir
Día 3
Shanghái
Hotel Yun´
s Paradise
Domingo 2
de agosto.
Visitando
Shanghai
Al
contrario que Mariví yo he dormido bien.
Música
china me despierta a eso de las seis y media. Ha amanecido hace rato y seguro
que los chinos hace ya rato que hacen Tai chi en algún sitio cercano.
El
desayuno tipo buffet siempre está bien; variado y abundante, quizás demasiado
abundante.
Parque y jardines Yu Yuan
El Jardín
Yuyuan de la ciudad de Shanghái es uno de los jardines más famosos de China.
Está situado en la zona norte de la ciudad, cerca de la antigua muralla.
Fue
diseñado durante la dinastía Ming, entre los años 1559 y 1577. Un funcionario,
de nombre Pan Yunduan, decidió construirlo a imagen y semejanza de los jardines
imperiales. El funcionario quería que sus padres, que no podían trasladarse a
la capital ya que eran demasiado mayores para viajar, pudieran ver
que
aspecto tenía un jardín de este estilo. Por eso le dio el nombre de Jardín
Yuyuan (Yu significa salud y
tranquilidad)
Templo CHENG HUANG MIAO
El nombre
Chenghuang Miao significa ciudad de dios. Constituye el núcleo de la antigua
ciudad de Shanghái, República Popular China. Abarca al complejo del templo y a
los tradicionales barrios del comercio que rodean al templo. Hay más de un
centenar de tiendas y comercios en esta área, y la mayoría de estas son de casi
de un siglo de antigüedad. El templo se conecta con el Jardín
Yuyuan
Junto al
estanque lo que más destaca es un bellísimo edificio tradicional chino, con
gran
ornamentación
y un brillante color rojo. Se trata de la Casa
de té Huxinting.
Cuando se
construyó durante la dinastía Ming este edificio fué conocido como el Pabellón
Fuyi y era utilizado como un lugar de tertulia por los comerciantes textiles de
la zona.
Tras ser
remodelado en el año 1785, fué con posterioridad, en 1855, cuando se convirtió
en una casa de té. Desde entonces, la Casa
de té Huxingting se ha convertido en
uno de los lugares más carismáticos de Shanghai y allí aprovechamos para sentarnos a descansar aunque tengo que
reconocer que el te que nos sirvieron a mi no me gustó demasiado.
Hace un
calor húmedo bastante intenso. Se impone la compra de botellines de agua. La
compra de agua será una constante a lo largo de todo el viaje y se convertirá
en el gasto cotidiano más importante con una media de unas diez botellas
diarias aunque es verdad que en la mayoría de los hoteles dejan dos botellas
gratis por habitación y todos los guías excepto uno que las vendía ofrecían
todas las botellas gratis que quisiéramos con lo que aprovechábamos para
rellenar la mochila al salir de ella.
Después de
visitar los sitios descritos seguimos andando por la ciudad hasta la plaza del
pueblo hasta llegar a un centro comercial
donde
entramos solo por refrescarnos con su aire acondicionado.
Shanghái
es la ciudad más poblada de China y una de las más
pobladas del mundo con más de 20 millones
de habitantes.
Shanghái
fue floreciendo como eje comercial entre China y las potencias coloniales y como nodo financiero y comercial a
partir de 1930.
El
río que la recorre es el Yangtsé
Tomamos el
autobús turístico que recorre Shanghái. Una grabación de mala calidad nos cuenta
lo que vemos durante el trayecto. Tampoco hay que pedir demasiado por lo que
cuesta el viaje ya que con un solo billete puedes pasear por la ciudad en
autobús todo el día.
Se impone
la visita a la torre Jin Mao
Torre Jin Mao
La
Jin Mao Tower literalmente «Edificio Dorado de la Prosperidad») es un rascacielos de 88 plantas situado
en la zona Lujiazui
del distrito de Pudong en Shanghái.
Contiene oficinas y el hotel Shanghai Grand Hyatt. Hasta 2007 fue el edificio más alto de China, el quinto más alto
del mundo por altura de
azotea
y el séptimo por altura de antena. Junto con la Oriental Pearl Tower,
es parte del skyline de
Pudong. Su altura fue sobrepasada el 14 de septiembre de 2007 por
el
Shanghai World Financial Center, que
está al lado del edificio. La Shanghai
Tower, un rascacielos de 128 plantas que se
encuentra al lado de estos dos edificios, cuya construcción finalizó a
principios de 2015, logra sobrepasar la altura de los dos anteriores.
Visita al Bund.
Autobús
para arriba, autobús para abajo amortizamos el billete recorriendo toda la
ciudad hasta llegar al restaurante Prince donde algún malpensado creyó ver
cucas caminando por el elegante suelo cuando
en
realidad era el hambre lo que les hacia ver visiones. Bueno igual si las vieron
pero, todos los bichos tenemos derecho a visitar un restaurante chino ¿no?
Sea como
fuere por el módico precio de 113 yuanes (20 euros) comimos los seis. El menú
incluía agua caliente para calentar el agua fría de la botella (eso pensábamos
al pricipio).La costumbre en China es tomar el agua caliente
Anochece
pronto (¿las seis?) por lo que aprovechamos para visitar el Bund de nuevo pero
esta vez vemos su
iluminación.
Luces de colores que visten los edificios ocultando tal vez los oscuros
negocios que seguro se tramen dentro.
GASTOS:
|
|
VISITA
AL TEMPLO: .......................................................
|
30 YUAN
|
VISITA A
LOS JARDINES YU YUAN...........................
|
30 YUAN
|
AUTOBUS.............................................................................
|
30 YUAN
|
TORRE
JIN MAO
............................................................
|
120 YUAN
|
RESTAURANTE
PRINCE................................................
|
113 YUAN
todos
|
Día 4.
Salida
hacia Guilin. Long sheng
Ping An
Hotel
3 de
Agosto
Lunes
Hoy no hay
desayuno, por tordos. Debimos haberlo reservado el día anterior y no lo
hicimos.
Para
compensar antes de abandonar el hotel nos tomamos un cafetín en la suite de
Pedro y Maxi.
Son poco
mas de las seis cuando salimos del hotel acompañados por Jimmy y su chofer
hacia el aeropuerto.
El vuelo
hacia Güillín (Kweilin) sale con retraso. Son ya las 9,45 cuando por fin
despega con rumbo hacia Güillín.
Dos horas
mas tarde aterrizamos en Kweilin como se dice realmente donde Juan (en realidad
Wan ) nos espera para trasladarnos en la furgoneta hasta Longsheng distante
unas dos horas de Kweilin. Allí es
necesario
aparcar la furgoneta y seguir en autobús popular 30 o 40 minutos hasta Pingan.
Pingan es
una aldea rural que vive de la agricultura y del turismo. Ubicada en la ladera
de la montaña y salpicada de arrozales trabaja volcada en el turismo sobre todo
de interior ya que pocos extranjeros llegan hasta aquí y mucho menos españoles.
El autobús nos deja abajo donde la gente espera por si necesitamos porteadores
tanto de equipaje como de personas.
Palanquines
al mas puro estilo oriental esperan alineados a que algún posible cliente,
quizás alguien débil o algo enfermo no se atreva a subir
andando hasta el hotel.
Una mas
que larga escalera recorre la ladera entre las casas, hosterías, restaurantes y
tiendas de artesanía y recuerdos hasta llegar a nuestro hotel, no sin antes
hacer una parada para comer tipica y realmente comida china.
El hotel
se llama Ping An y es muy bonito decorado con estilo rural.
Hábilmente
Maxi se da cuenta que también hoy nos corresponde cena y así se lo hacemos
saber al guía que no era consciente de ello. Quedamos a las ocho y media para
cenar y después de echar un vistazo a las habitaciones y descansar un rato nos
atrevemos a dar un primer
paseo por
la montaña. Son las cinco y media de la tarde.
El paisaje
es de concurso de fotografía. Las terrazas con el cultivo de arroz se
distribuyen por toda la pendiente de la montaña en líneas onduladas formando un
mágico espectáculo. Los bosques de bambú, coníferas, laureles, cipreses y otros
arboles desconocidos para nosotros compiten por ofrecernos una inolvidable
visión.
Los
puestos de artesanía se distribuyen a lo largo del sendero de pizarra que sube
entre las casas hasta un mirador donde optamos por darnos la vuelta.
Aunque el
guía nos ha dicho que todo es de fabrica y no hay casi nada hecho a mano
siempre llama la atención todo lo que se ofrece y Maxi y Mariví le compran a
una mujer a buen precio unos libros de fotografías .
A las 8,30
cenamos en una mesa circular con plato giratorio en el centro. Los platos son
variados y están bien preparados lo mismo que lo estaban en la comida.
Pollo con
salsa agridulce, berenjenas, fideos de arroz, arroz pegajoso en caña de bambú,
vainas, col y sandia.
Y, a las
diez en la cama estés mejor antes que después.
Mientras
la furgoneta recorre kilómetros y kilómetros, Juan no para de contarnos cosas
sobre Kweilin y Longseng.
Los
cultivos en terrazas se construyen a lo largo de la pendiente de la orilla del
río hasta la cima de la montaña, entre 600 y 800 m sobre el nivel del mar. El
cultivo de arroz en terrazas se inició hace 650 años.
Longseng
recibe su nombre porque las terrazas de arroz se asemejan a las escamas de un
dragón, mientras que la cumbre de la cordillera se ve como la columna vertebral
del dragón.
A
principios de junio, el agua se bombea a través de los campos de arroz y las
plantas jóvenes se transfieren a las terrazas principales.
Día 5
Día de
Trekking. Etnia Yao
Hotel
Guilin Bravo (****)
4 de
Agosto
Martes
A las 11
estábamos ya en la aldea Yao de Zhong lin donde descansamos y compramos agua.
Son las
12,30 cuando empiezan a caer unas gotas que se convierten en un aguacero típico
de esta época en esta zona y que nos obliga a guarecernos en una casa rural
donde una amable pareja de abuelos con su nietilla nos hacen pasar unos buenos
momentos.
Desayuno a
base de café con tostadas, mermelada, plátano y frisuelos.
recorre la
montana por encima de los arrozales ofreciendo durante todo el camino una vista
de postal oriental.
La etnia
Zhuang es la que habita estos parajes pero recibe visitas de mujeres de la
etnia Yao que tienen el pelo muy largo y se
lo dejan
fotografiar a los turistas a cambio de 10 yuanes cada una.
Ya con los
chubasqueros puestos seguimos el camino hasta Dazai bajo una lluvia no muy
intensa pero pertinaz.
A las
14,30 cogemos el autobús hasta donde se encuentra nuestra furgoneta a las
15,10. 2 horas mas tarde llegamos a Guilin (kweilin).
Después de
una refrescante ducha y una buena cena en la que se discute la reorganización
del itinerario un poco maltratado desde la propuesta inicial nos vamos a hacer
un recorrido por los llamados cuatro lagos de kweilin: El lago de pino, el lago
de ficus, el lago del laurel y el lago del dragón de madera.
Los tres
primeros tienen 1400 años de historia y eran utilizados para la defensa de la
ciudad.
Enfrente
del embarcadero están las pagodas sol y luna bonitamente iluminadas. Después le
siguen el puente de las siete estrellas, el puente del matrimonio, una replica
del legendario puente de zhaozhou de 1500 años de antigüedad, replica del arco
del triunfo
de Paris
del Golden Gate. Tótem de las etnias locales y un teatrillo musical referente a
la leyenda de Liusanjie; aquella cantante yao que cuando mejor cantaba era
cuando su cancion criticaba a los terratenientes que la asesinaron. Quizás lo
mas interesante de todo haya sido la pesca con cormoranes.
Alguna
representación teatral y la música que nos ofreció Liaorunping de 22 años
tocando el erhu, un instrumento autóctono de dos cuerdas.
Después de
un paseo por el mercadillo de la ciudad nos dirigimos andando hasta el hotel.
GASTOS
Paseo en
barco por los lagos de Guilin............ 210 x 6.............1260 yuan
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